“¿Qué pasa con una democracia cuando los periodistas y artistas tienen miedo de expresar libremente sus críticas a quienes están en el poder?”, es una de las preguntas que hacemos a Vilma Vargas, un talento en ascenso en el mundo del arte ecuatoriano. Fue seleccionada dos veces para el “World Press Cartoon” en Portugal y ganadora en RESET 11.11.11 en México como mejor caricaturista.
Bajo el mandato de Rafael Correa, actual presidente de Ecuador, el incumplimiento de la nueva Ley de Comunicación ha provocado sanciones, e incluso cierres, de algunos medios de comunicación. Además, ha habido demandas millonarias y amenazas contra periodistas, quienes en algunos casos se han visto obligados a abandonar el país. Esta situación ha contribuido a lo que Vilma Vargas señala como el “momento más grave en lo que a libertad de prensa se refiere”.
Sin embargo, esto no ha intimidado a Vargas, que ha continuado con su estilo franco; y mientras muchos caricaturistas ecuatorianos se han vuelto cautos a la hora de publicar sus trabajos, las de Vilma se destacan por su irreverencia.
Una Mujer en una profesión dominada por hombres
Chekhov: Cuando el diario El Comercio pidió a seis artistas dibujar un cómic con el tema “Si los superhéroes vivieran en Ecuador”… usted era la única mujer seleccionada. ¿Significa esto que hay cinco artistas masculinos para cada artista femenina en Ecuador, o cree que los artistas de su género a menudo se pasan por alto?
Vilma Vargas: El Ecuador se caracteriza por tener varios artistas de renombre, así como muchos caricaturistas. Lastimosamente, en el humor gráfico hay algunas mujeres que aún están en la sombra y somos muy pocas quienes nos hemos ganado un lugar en la prensa. Pero en el humor gráfico es como en otras áreas: las mujeres aún están relegadas a un segundo plano.
Además, la historia siempre está escrita por hombres. En la historia del Arte han existido varias mujeres artistas, escultoras y pensadoras; sin embargo, pese a su importancia, se las ha pasado por alto.
Chekhov:¿Qué consejos puede darles a las jóvenes artistas femeninas que buscan su voz artística y que luchan para que el mundo presta atención a su arte?
Vilma Vargas: Creo que en mi país las mujeres y la gente en general está más preocupada en solventar sus necesidades básicas que en realizar algún tipo de arte. Sin embargo, la gente que opta por alguna actividad artística debe saber que el arte es un modo de vida. Y arriesgarse y expresarse es la mejor forma de libertad.
Chekhov: Entonces, para que este se convierta en un modo de vida, hay que enfocarse ciento por ciento al arte. ¿Esta es una de las razones por las que usted dejó su carrera de arquitectura?
Vilma Vargas: Creo que fue una necesidad; las pasiones a veces se imponen y son necesarias ciertas renuncias para enfocarte en el trabajo creativo. Sin embargo, no he dejado del todo la arquitectura, sólo que es el arte quien no me deja que lo abandone…
Acoso Gubernamental Contra la Libertad de Expresión
Chekhov: ¿Con los caricaturas que publica en el periódico Hoy recibe suficiente para mantenerse, o tiene que buscar otras fuentes de ingresos?
Vilma Vargas: Como sabes, la prensa atraviesa uno de los más graves momentos por el acoso gubernamental en cuanto a la libertad de expresión y eso ha afectado a varios medios, incluído el Diario en el que colaboro. Por lo que yo vivo de mis dibujos, ilustraciones, murales en cerámica y también un poco del aire.
Chekhov: La libertad de expresión es uno de los temas más abordados en sus caricaturas. ¿Puede contarnos cuál es la importancia de la libertad de expresión y el significado existente detrás de dibujos como el de la libertad de prensa atacada por murciélagos?
Vilma Vargas: Ese es un dibujo que está basado en un grabado de Goya, que se llama “El sueño de la razón produce monstruos”. Lo que hice fue representar a la prensa acosada por varias sombras.
Lo malo es que la realidad no es como la caricatura; si aquí opinas diferente no te verás perturbado por inocentes murciélagos sino por todo el peso de una ley que responde casi siempre a los intereses del Gobierno.
Chekhov: ¿Qué le ocurre a una democracia cuando los periodistas tienen miedo de investigar y criticar a quienes ostentan el poder?
Vilma Vargas: En primer lugar ya no sería democracia, caso contrario no tendrías miedo de opinar, de criticar o de autocriticarte, inclusive. El riesgo latente con éstas medidas de presión y leyes de comunicación que atentan a nuestras libertades es que los periodistas y medios periodísticos ejercerán una autocensura, que a los únicos que perjudican es a la gente porque no te llega la información o la investigación adecuada de varios temas.
La “Legalización” del acoso contra el periodismo
Chekhov: ¿Cómo es la nueva Ley de Comunicación de Ecuador y quiénes son las personas de traje y corbata que, en su caricatura, salen del Caballo de Troya?
Vilma Vargas: Antes de la “Ley de Comunicación” ya existía cierta presión y acoso a varios medios. Ahora lo único que se hizo fue la “legalización” de esas prácticas. En el dibujo represento una ley disfrazada de regalo y de legalidad, pero que en su interior pululan varios seres que, en su pensamiento, ya tienen incorporadas las prohibiciones.
Chekhov: ¿Puede contarnos acerca de la correlación entre lo que está sucediendo a nivel nacional con respecto a los periodistas que tienen miedo de criticar al presidente Correa y cómo este ha colocado políticos en el nivel municipal para amenazar, hostigar y dejar sin trabajo a periodistas que investigaban casos de corrupción municipal, como el caso de Ignacio Ramos Mancheno?
Vilma Vargas: El problema que tiene el Gobierno es creer que lo que ellos dicen es la verdad y armar todo un aparato ideológico en las cadenas sabatinas para convencernos de “su verdad”. Así, es normal que existan muchos roces con voces no oficialistas.
Yo no conozco muy a fondo el caso de Ignacio, pero es visible que a él como a muchas personas se le han cerrado las puertas laborales por no comulgar con el poder. Incluso el humor está monitoreado, pues podemos ver casos de caricaturistas que han sido mencionados en las sabatinas.
Chekhov: En referencia a mi caricatura favorita, “la vaca cebra”, ¿puede contarnos cómo las redes sociales fueron claves en el momento de divulgar mensajes como el de esta caricatura, y de los periodistas y ciudadanos que lucharon para encarcelar, por corrupción, al ex-alcalde Juan Salazar?
Vilma Vargas: Hace mucho tiempo que yo no tocaba los temas de mi ciudad debido a malas experiencias con los directivos de cierto diario local que censuraban mis dibujos. Sin embargo, dada la importancia del tema, nuevamente estoy opinando sobre la ciudad en las redes sociales; de allí viene el dibujo del alcalde, que tengo entendido no le hizo ninguna gracia a sus partidarios. Es así, que las redes sociales son muy importantes para difundir las voces divergentes.
Logo de la campaña Ecuador ama la vida
Chekhov: Muchas de tus caricaturas recientes se centran en el tema del Parque Nacional Yasuní y de la decisión del Presidente Correa de explotar el petróleo. ¿Puede hablarnos de sus sentimientos sobre el Yasuní. ¿Ha tenido la oportunidad de visitar este lugar?
Vilma Vargas: Tuve la oportunidad de pintar un mural en el Coca y ver la sobrecogedora naturaleza que tenemos. La ciudad de El Coca es una población que se formó alrededor de la extracción petrolera.
En cuanto a la explotación del Yasuní, ésta no debe ser una decisión únicamente del Gobierno, sino de toda la población del país, porque es algo que nos concierne a todos. Con esta noticia, el mundo puede darse cuenta que tenemos un gobierno para el que no es prioridad conservar las maravillas naturales del Ecuador.
Los riesgos de ser libre y de opinar diferente
Chekhov: Después de que el periodista Emilio Palacio escribió que la presidencia de Correa era una dictadura, tuvo que buscar asilo político en Estados Unidos para escapar de tres años de cárcel y de una indemnización de 4 millones de dólares… Si usted continúa dibujando caricaturas de Presidente Correa, como la que aparece con tres cabezas que representan los tres poderes del Estado, ¿ha pensado en la posibilidad de que algún día usted también tendrá que salir el país si quiere seguir expresándose libremente?
Vilma Vargas: Denunciar y hacer arte o decir lo que uno piensa siempre trae sus riesgos. Ser libre y opinar diferente también. Mientras mi lucidez me lo permita seguiré dibujando porque, aunque puede sonar contradictorio, mientras más mal le va al país, más trabajo tenemos los caricaturistas.
Más sobre Vilma en su página web: http://www.vilma-vargas.com/